Querido DICIEMBRE:
Cambiaste de la noche a la mañana y sin dar explicaciones,¿Dónde te has quedado?. Lo tuvimos todo siendo nada y lo perdimos todo intentando ser algo. Dicen que las despedidas pesan un kilo más cuando te marchas, y que duelen el doble si eres tu quien tiene la culpa. Y te pregunto, ¿Es proporcional el deseo del amor a lo que dura el dolor del desamor?. Y no hay cosa más estúpida que gastar fuerzas en intentar enmendar algo que puede que no merezca la pena. "De nuevo casi rozando el cielo" Y caer en picado y estamparte contra el suelo.
PD: Pudimos ser eternos pero no llegamos ni a intentarlo
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